Hace frío y el cielo está oscuro, llueve durante dos días seguidos y estás de mal humor… ¿Te suena a otoño?
En otoño realmente se suele tener un estado de ánimo especial y el aire está lleno de los sueños de verano que no se han cumplido. Con la lluvia y las hojas caídas de los árboles siempre echamos de menos a los días calurosos de verano, los sonidos del mar, la belleza del bosque verde de verano.
Y así estamos hasta que llega el invierno, hasta que aparecen las primeras nevadas y con los camiones rojos de Coca-Cola esa sensación de algo mágico, navideño. Es entonces cuando nos acordamos de que la vida es bella.
Pero incluso durante los tristes meses del otoño se puede obtener una dosis del optimismo y estar de buen humor. Intentemos crear un ambiente cálido y cómodo en su piso o casa.
Entonces, imagina…
Ahí fuera está lloviendo. El sonido de las gotas se hace monótono y sólo de vez en cuando se escucha como pasa un coche. Los truenos indican que el mal tiempo de otoño va a durar mucho, que esto sólo acaba de empezar.
Pero tú estás sentado en un sillón cómodo y suave, tan suave que casi te hundes en él. Enfrente hay una chimenea de la que nos llegan sonidos tan placenteros y cuya luz genera sombras curiosas en el techo.
Se extiende el olor de café fresco y leña de pino por toda la casa.
Suena música tranquila y estás tan cómodo y relajado que te gustaría que esta tarde no se acabara nunca.
Y que todo el mundo espere…
Está bien, ¿no? Y aunque aún no tengas una casa de campo hecha de madera con una chimenea, puedes disfrutar de unos minutos de placer y llenarte del optimismo ahora mismo, creando este ambiente tan cómodo en tu propio piso.
Para ello se necesita:
- Café o té favorito.
- Un sillón/ una cama/ un sofá.
- Una manta.
- Un libro favorito.
- Nuestros sonidos.
Es preciso ventilar la habitación con antelación, pero a la vez es importante que se mantenga caliente. Se puede encender la calefacción y abrir un poco la ventana a la vez, aunque sea poco eficiente ya que estarías calentando el exterior, pero así se consigue tener aire fresco y caliente a la vez.
Ponemos los sonidos, nos sentamos en el sillón, nos tapamos con la manta y empezamos a leer, o simplemente cerramos los ojos y disfrutamos del momento, dejando todos los problemas fuera de tu hogar. Dentro de unos minutos se mejorará tu estado de ánimo.
No lo crees? Pues, ¡inténtalo!
Se puede ajustar el volumen de cada banda sonora o quitar una música y poner otra, la que más te guste.
¡Disfrútalo!
Configuracion de sonido
Sonidos de la lluvia
Sonidos de la chimenea
Sonidos del trueno
Música
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